Desde que somos prácticamente niños se nos da una idea con bastante frecuencia, trabajar para ganar dinero, y en muchas ocasiones nos obsesionamos con la idea de generar riqueza o por el contrario, nos desentendemos por completo del tema. En otras palabras, frecuentemente vamos a los extremos, la intención de este artículo será dar una opinión sobre este tema que parece bastante obvio para muchos, pero en verdad tiene grandes reflexiones.

Durante nuestra experiencia, dependiendo de la edad que poseas, verás las cosas de un modo u otro según las acciones realizadas, los consejos recibidos, el modo de hacer las cosas y desde luego el criterio propio que se va formando con el pasar del tiempo siempre y cuando se nos obligue a reflexionar. Si estamos acostumbrados a realizar esta acción “pensar”, entonces la pregunta sobre trabajar para ganar dinero no nos parecerá tan descabellada sino interesante.

Desde hace bastante tiempo ha existido esa incertidumbre acerca de la suerte de algunos y la desgracia de otros, por qué algunos ganan tanto dinero a pesar de no esforzarse del mismo modo que aquellos acostumbrados a trabajar hasta el cansancio para conseguirlo. Claro que se debe trabajar para ganar dinero, el problema está en cómo lo usas, cómo lo inviertes, cómo lo administras; al realizar esto bien seguramente con el tiempo ya no deberás esforzarte tanto para conseguir la misma suma o superiores.

Para responder algunas inquietudes citaremos parte de una obra bastante conocida sobre el tema llamada Padre rico, Padre pobre de Robert T. Kiyosaki, en la obra se nos pretende dar una guía sobre el uso que debería darse al dinero no una orden que se debe seguir ciegamente, esto el lector podrá comprobarlo por su cuenta si obtiene el ejemplar.

Si deseas riqueza debes moderar lo que dices.

Esta frase debe leerse con cuidado debido a la interpretación que pueda darse, debido a que en varias citas que se realizaran sobre la obra mencionada, el lector podrá creer que todo gira alrededor de hacerse rico y no apreciar en verdad el fondo del asunto, es algo parecido al título de este artículo ¿Se debe trabajar para ganar dinero? la mayoría responde de forma inconsciente ¡Sí! cuando en realidad se desea ir más a fondo en este asunto.

Por este motivo, no solo es necesario leer con cuidado sino también pensar mejor aquello que decimos con cierta frecuencia, expresiones como ¡No puedo hacerlo! ¡Es imposible de conseguir! ¡No nací para hacerlo! pueden ser peligrosas por el simple hecho de creérnoslo, generando así una imposibilidad de reacción cuando suceda un hecho que cambie radicalmente nuestras vidas. Sobre esto se menciona en el texto:

Dado que tuve dos padres influyentes, aprendí de ambos. Tuve que pensar en el consejo de cada uno de mis padres, y al hacerlo, obtuve una valiosa perspectiva sobre el poder y el efecto de nuestras ideas en nuestra vida. Por ejemplo, uno de mis padres tenía la costumbre de decir: “no puedo comprarlo”. El otro padre prohibió el uso de esa frase. Él insistía en decir: “¿Cómo puedo comprarlo?” La primera frase es una declaración; la segunda es una pregunta. La primera nos deja al margen, mientras que la otra nos obliga a pensar.

Kiyosaki, 2004, p. 27

La idea que se nos presenta es evitar la negación, pero tampoco nos alienta a ser optimistas. La clave esta en no ponerse un limite, en aprender a pensar, es decir, ejercitar nuestro cerebro y para ello existen muchos modos diferentes, desde este punto de vista es más factible llegar a una solucioón ingeniosa aunque este temporalmente fuera del alcance que no intentarlo.

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Ahora bien, la explicación que el autor de la obra da a continuación acerca de esta manera de pensar puede aplicarse en muchas ramas diferentes, ya sean empresarios, academicos, deportistas, profesores, entre otros.

Mi padre, el que pronto sería rico, explicaría que al decir automáticamente las palabras “no puedo comprarlo”, tu cerebro deja de funcionar. Al formular la pregunta “¿cómo puedo comprarlo?” Tu cerebro se pone a funcionar. El no quería decir con lo anterior que uno debe comprar todo lo que uno quiere. Él era un fanático de ejercitar la mente, la computadora más poderosa del mundo.

Kiyosaki, 2004, p. 27

Dos estilos de pensamiento

En este apartado podremos observar la manera en la cual se describe a dos personas que difieren respecto al hecho de trabajar para ganar dinero, veremos como se llevan a cabo estos pequeños argumentos.

Mis dos padres tenían maneras de pensar contrapuestas. Uno de ellos pensaba que el rico debía pagar más impuestos para beneficiar a los menos afortunados. El otro decía: “Los impuestos castigan a quienes producen y recompensan a quienes no producen.” Uno de mis padres me recomendaba: “Estudia duro para que encuentres una buena
compañía para la cual trabajar.” El otro recomendaba: “Estudia duro para que encuentres una buena compañía que comprar.”

Uno de ellos decía: “La razón por la que no soy rico es porque tengo a mis hijos.” El otro decía: “La razón por la que debo ser rico es porque tengo a mis hijos.” Uno alentaba la conversación sobre dinero y negocios durante la cena. El otro
había prohibido hablar de dinero durante la cena.

Uno decía: “En lo que se refiere al dinero, juega a lo seguro, no tomes riesgos. El otro decía: “Aprende a manejar el riesgo.”

Kiyosaki, 2004, p. 28

Como podemos apreciar, esta obra no es lo que parece, no es la idea que todos seamos empresarios, ricos, famosos o millonarios, la intención básicamente reside en cambiar alguna de las acciones que nos impiden llegar más lejos en lo que respecta a la generación del dinero, en saber aprovechar las oportunidades que se nos presentan y desde luego para esto se debe estudiar, aprender y esforzarse en ejercitar nuestra mente no solo en lo financiero, sino en aquello que nos obliga a realizar acciones beneficiosas en largo plazo, en otras palabras mejorar nuestros hábitos en lo físico y mental.

Para terminar por ahora con este primer articulo sobre la necesidad de trabajar para ganar dinero, me gustaría decir que en la obra se menciona esa frase tan conocida de John D. Rockefeller “No trabaje por el dinero, deje que el dinero trabaje por usted”, pero de forma diferente, sin embargo la idea es la misma, y sobre esto, el poder de las ideas, veremos que dice el autor sobre su propio aprendizaje.

Me di cuenta de que mi padre pobre no era pobre debido a la cantidad de dinero que ganaba, que era importante, sino debido a sus ideas y acciones. Siendo joven, y al tener dos padres, me di cuenta de que debía ser cuidadoso al seleccionar las ideas que adoptaría como propias.

Kiyosaki, 2004, p. 28

Ahora bien, quedará de parte del lector ser cuidadoso con aquello que considera cierto y más cauteloso con una idea que asume como acertada con rapidez, el proceso de reflexión siempre será necesario y lo que busca la obra es mostrarle ambas perspectivas para decantarse por aquella que le será de mayor utilidad.

Libro consultado

Kiyosaki, R.(2004). Padre rico padre podre. Aguilar

Si deseas leer la obra por tu cuenta el link que aparece arriba te permitirá descargar la versión empleada en este artículo, en ese momento podrás comenzar a sacar tus propias conclusiones.